- Servindi.- El brutal asesinato de Berta Cáceres no es de ninguna manera un hecho aislado, sino parte de un patrón de estado flagrante y sistemático de violencia corporativa contra las mujeres, los pueblos indígenas, defensores de los derechos humanos y el pueblo de Honduras.
El documento fue entregado a la embajadora Mary Elizabeth Flores Flake, Representante Permanente de Honduras ante las Naciones Unidas y es suscrito por la Organización Fraternal Negra Hondureña (OFRANEH), Amigos de la Tierra-EEUU, Just Associates (JASS), Indigenous Environmental Network y Global Justice Ecology Project (GJEP) quienes efectuaron un plantón frente a la representación oficial de Honduras..
La misiva exige el fin inmediato de la violencia estatal y corporativa y llama a una vuelta al estado de derecho y la democracia real en Honduras.
Condena el asesinato de Berta Cáceres y expresa su preocupación por cómo las autoridades hondureñas están manejando la investigación y la seguridad de los líderes clave dentro del Consejo Cívico de Organizaciones Populares e Indígenas de Honduras (COPINH) y otros miembros de la sociedad civil directamente relacionadas con el caso.
En tal sentido denuncian la detención de Aureliano Molina Villanueva, miembro del COPINH e instan a las autoridades nacionales a tomar todas las medidas para garantizar la seguridad y la seguridad de los miembros del COPINH
Asimismo, instan a las autoridades hondureñas para proporcionar un retorno seguro a México de Gustavo Castro, uno de los testidos del crimen de Berta Cáceres, y que también fue herido de bala.
Al respecto, piden cumplir y hacer cumplir las medidas cautelares otorgadas a Gustavo Castro, a miembros de la COPINH y familiares de Berta Cáceres que actualmente se encuentran bajo amenaza.
El mundo está observando
Los peticionarios afirman que es necesario suspender todos los proyectos en el Río Gualcarque, en particular, los gestionados por la empresa DAES, y que han ocasionado el despojo territorial y que muchas vidas inocentes se pierdan por oponerse a estos proyectos.Piden revisar con urgencia todos los casos en que los pueblos indígenas y las comunidades rurales rechazan la construcción de presas, megaproyectos, ciudades modelo, plantaciones de agrocombustibles, las compensaciones de carbono como el Mecanismo de Desarrollo Limpio y REDD y otros proyectos a gran escala.
Precisan que es necesario tomar medidas para prevenir la violencia y prestar atención a la demandas de estas comunidades, para lo cual es indispensable dejar de criminalizar y perseguir a los defensores de derechos humanos y de la justicia social.
Finalmente llaman a Honduras a demostrar a la comunidad internacional que es serio acerca de poner fin a un patrón de impunidad y frenar los ataques contra los defensores de los derechos humanos y el medio ambiente al permitir y facilitar una investigación independiente y exhaustiva sobre el asesinato de Berta Cáceres.
La carta abierta fue enviada con copia al Secretario general de las Naciones Unidas, Ban Ki-moon; al Consejo de Derechos Humanos; al Mecanismo de Expertos de las Naciones Unidas sobre los pueblos indígenas, al Foro Permanente para las Cuestiones Indígenas, a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos y otros organismos de Naciones Unidas y del sistema onteramericano.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario